UNOS NARCOS A REMO

En plena madrugada, los dos 'narcos' habían sufrido un duro contratiempo en alta mar que puso en peligro no solo sus planes, sino su propia vida porque quedaron a la deriva y dos buques mercantes casi les pasan por encima. Pero habían salido sanos y salvos de la travesía, y pensaron que a pesar de todo aún podrían cantar victoria si le echaban imaginación y llegaban hasta el final en su ilícito objetivo: desembarcar en Cartagena mil kilos de hachís con una lancha neumática. A falta de motor, se dijeron, bien valen los propios brazos. Y llegaron a su meta a remo. Lo que no sabían es que la Policía les esperaba al final de su escapada.

La rocambolesca historia de la banda de presuntos traficantes de droga desmantelada el pasado fin de semana en una operación conjunta de la Policía Nacional, la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera sigue deparando sorpresas.

En mitad de la noche

Hasta ahora había trascendido que los 'narcos' fueron arrestados el sábado tras ser remolcados al puerto deportivo de Cartagena por Salvamento Marítimo (Sasemar), al que recurrieron como náufragos cuando el motor de su embarcación semirrígida se estropeó a unas veinte millas de la costa.

Y lo que ahora ha sabido 'La Verdad' es que no fueron detenidos en el muelle del Yacht Port, adonde les llevó Sasemar (que no tiene tareas de control e inspección), sino en el del Espalmador, adonde llevaron a remo la lancha en cuyo casco ocultaban la droga cruzando de forma sigilosa todo el puerto durante casi una hora.

Según confirmaron fuentes de la investigación, los tripulantes, ambos naturales de la provincia de Alicante, salieron en dirección a la bocana alumbrados solo por las luces del puerto y tal vez con toda la cautela del mundo por unas linternas que llevaban consigo.

Llegaron a la única zona del entorno donde podían sacar a tierra la embarcación sin necesidad de una grúa, pescante o brazo mecánico (lo que aumentaba el riesgo de ser descubiertos). En El Espalmador, una zona menos a la vista, una rampa les facilitó la tarea a ellos y a las otras tres personas que les esperaban para cargar el hachís en un todoterreno.

Pero los sabuesos de la Comisaría de Cartagena les pisaban los talones. Y a la altura de la rotonda de Lo Campano casi ya en el enlace con la autovía de Murcia y por lo tanto el enganche con la de Alicante les frenaron en seco.Su arriesgada aventura, que la Policía enmarca en la actividad de una red que traía cannabis de Marruecos sobre todo a través de Valencia y Alicante (en total ha habido ocho detenidos), les ha deparado a la mayoría un final menos risueño, si bien provisional hasta la espera de juicio: cárcel por un presunto delitos contra la salud pública y otro de asociación ilícita.http://www.laverdad.es