EL RASTRO DEL DINERO DE LAS MAFIAS SE PIERDE.

LA FISCALIA VE RIDICULAS LAS INCAUTACIONES AL CRIMEN ORGANIZADO

Los golpes policiales están impidiendo que el crimen organizado crezca en Andalucía, pero no lo consiguen noquear. La Fiscalía Anticorrupción cree que en el último año se han intervenido "pocos efectos" para los centenares de personas detenidas. Pone como ejemplo provincias muy del gusto de estos grupos, como Málaga y Cádiz, en las que apenas se han interceptado 6.200 euros y 13.000 euros, respectivamente. También resalta que tanto en la Costa del Sol como en Almería, donde la intensa actividad inmobiliaria atrae dinero negro, no se han bloqueado propiedades.

La unidad antimafia del Cuerpo Nacional de Policía maneja unas cifras distintas de las de los fiscales. Según sus cálculos, los agentes de la Costa del Sol han participado en operaciones que han supuesto el bloqueo de 2,2 millones, otros 2 millones en acciones societarias, y 24 propiedades con un valor catastral que supera los siete millones de euros.

Ninguna de las dos instituciones quiere entrar en polémicas. En la fiscalía aseguran que han recogido estos datos de informes policiales. "No queremos tirar de las orejas a nadie, sino poner de manifiesto una realidad, e incidir en que hay que poner más empeño en bloquear el dinero del crimen organizado", precisa el fiscal superior, Jesús García Calderón. El fiscal italiano Pietro Grasso, célebre por su intensa lucha contra la mafia y por la captura del mítico Bernardo Provenzano, fugitivo desde 1963, en Corleone (Sicilia), ha insistido siempre en este aspecto. "Es fácil sustituir a un mafioso mientras está en la cárcel, pero es mucho más difícil sustituir sus bienes", dijo en marzo de 2010, tras dar una conferencia en Granada.

El golpe al bolsillo de las mafias debilita sus estructuras y además es rentable para el Estado, que puede utilizar esos fondos o bienes para dotarse de medios que le permitan luchar con más fuerza. El ministerio público reclama que se intensifique la coordinación con la Policía y con las unidades de apoyo especializadas en la persecución del rastro financiero, como la Agencia Tributaria, sobre todo, en una situación de crisis, como la actual.

En Andalucía, las provincias de Sevilla, Málaga y Cádiz siguen siendo las favoritas del crimen organizado. Según los expertos, las tres provincias tienen un riesgo alto de implantación de mafias y la mitad de los grupos que actúan en ellas tienen una peligrosidad "alta o muy alta". Jaén tiene perfil "muy bajo" y Granada, Almería, Huelva y Córdoba, por este orden, tienen un nivel medio de implantación mafiosa.

En 2009 se estimó que había 81 bandas organizadas instaladas en la región. Los últimos datos policiales indican que esta cifra se ha estancado en el último año, algo que pone a la región andaluza en una situación "comparativamente más favorable" respecto al resto de España, según estimaciones de la Fiscalía.

Estos grupos delinquen en tres campos tradicionales: narcotráfico, robos y, en menor medida, se dedican a la inmigración irregular con fines de explotación sexual o laboral. Están formados por una media de 40 personas, de los que más de la mitad suelen ser españoles, y cada vez recurren menos a la violencia o la intimidación.

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