IMPULSO A LA CAUSA POR CONTRABANDO DE TABACO Y BLANQUEO CONTRA EL EX ALCALDE DE RIBADUMIA

La Fiscalía de Delitos Económicos de Pontevedra, el Servicio de Vigilancia Aduanera y el Juzgado número 1 de Vilagarcía han dado un nuevo impulso a la causa de contrabando de tabaco y blanqueo de capitales que en 2001 le costó la Alcaldía de Ribadumia a José Ramón Barral, Nené, detenido con su hermano Feliciano y otras 16 personas por un alijo de 400.000 cajetillas de tabaco Magnum (valoradas en 1,5 millones de euros) intervenidas en cuatro contenedores a bordo del mercante Mars, en Vigo.


Las numerosas comisiones rogatorias enviadas desde entonces para localizar cuentas en el extranjero del exregidor en Holanda, Portugal, Noruega y Suiza, y las evasivas de este último país han dilatado la causa durante una década. El último "cartucho" del juzgado vilagarciano para cerrar las diligencias previas fue solicitar a Suiza hace un mes una ampliación de una comisión rogatoria que las autoridades helvéticas ya habían contestado. En concreto, pedía varias entradas y registros de los domicilios o negocios relacionados con una persona que vive en Suiza y que los investigadores creen que en su día llevó la contabilidad de Barral.
El ribadumiense fue detenido en 2001 en una operación contra el contrabando de tabaco y evasión fiscal que dirigió José Antonio Vázquez Taín, que entonces estaba al frente del juzgado 1 de Vilagarcía. Tras recobrar la libertad, Nené Barral dimitió de la Alcaldía. Una década después, la ampliación de la comisión rogatoria enviada a Suiza podría ser la última oportunidad de los investigadores y los instructores de sentar a Barral en el banquillo de los acusados. Y es que el delito por contrabando de tabaco podría haber prescrito ya, y el exalcalde y los demás imputados solo podrían ser juzgados por blanqueo si finalmente aparece alguna prueba solvente de que cometió tal delito.
La Fiscalía, pese a los obstáculos de algunos países a las comisiones rogatorias, sitúa a Barral Martínez al frente de una importante organización con amplia infraestructura para el transporte de tabaco de contrabando. Una de las vías utilizadas era el tráfico en contenedores. El incautado en el Mars iba oculto entre madera y procedía de Estados Unidos pero había sido embarcado en los Emiratos Árabes desde donde llegaba a Europa. El cargamento de tabaco intervenido por el Servicio de Vigilancia Aduanera tocó el puerto de Valencia, prosiguió al de Leixoes (Portugal) y de allí llegó al de Vigo.
Los abogados de los imputados, entre los que figuran varios agentes de la guardia civil y del Servicio de Vigilancia Aduanera que presuntamente daban cobertura o facilitaban información al grupo contrabandista, solicitaron en diversas ocasiones el sobreseimiento de la causa dada las dilaciones del proceso, pero la Audiencia de Pontevedra lo desestimó. Estas demoras de la Justicia benefician al reo, y de hecho el fiscal especial antidroga de Pontevedra, Luis Uriarte, pidió esta misma semana la creación de juzgados especializados para evitar que las instrucciones complejas de narcotráfico o blanqueo se eternicen.
En el caso del de Nené Barral, se trata del asunto abierto por evasión fiscal y contrabando más antiguo de todos los que se tramitan en la Fiscalía de Pontevedra.
José Ramón Barral mostró en su día la intención de asumir en solitario el delito de contrabando de tabaco y exculpó al resto de implicados. Tildó de "error privado" lo sucedido y alegó que su relación con el cargamento de cigarrillos intervenido en el puerto de Vigo era el de un mero mediador en una transacción comercial legal, pues se trataba de mercancía extranjera que proseguía viaje con destino al Reino Unido sin quedarse en España. Considerado uno de los pioneros del contrabando de tabaco en Galicia, nunca había sido detenido hasta entonces.
Le gente lloró su marcha
Nené Barral era en 2001 uno de los políticos más populares e influyentes de O Salnés. Llevaba casi dos décadas al frente del municipio de Ribadumia, que con él en la Alcaldía pasó de ser un ayuntamiento eminentemente rural y con apenas infraestructuras públicas a tener el primer polígono industrial de la comarca y un crecimiento demográfico y económico espectacular.
Peso pesado del Partido Popular, Barral fue mentor político tanto del actual presidente de la Diputación, Rafael Louzán, como de Salomé Peña, una joven licenciada que en 2001 tomó el bastón de mando tras la dimisión de Barral y que hoy sigue al frente del municipio. Las relaciones de Nené, Louzán y Peña acabaron deteriorándose, y Barral regresó a la política en 2003 al frente de un partido independiente que en apenas tres meses estuvo a punto de dar jaque mate a la potentísima maquinaria electoral de sus antiguos compañeros del Partido Popular. En los últimos comicios renunció finalmente a presentarse.

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