Un acusado negó ayer durante un juicio celebrado en la Audiencia haber colaborado con una banda de narcotraficantes en el desembarco de 3,7 toneladas de hachís en una playa de Dénia el 22 de abril de 2008, según informaron fuentes jurídicas.
El sospechoso, A.L., de origen marroquí, se encuentra en prisión preventiva por estos hechos después de que no compareciera a la vista tras la que fueron condenados otros ocho acusados.
Ayer, ante el tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia, negó haber prestado un camión de su propiedad para trasladar los fardos de droga. Según su versión, él solía esconder las llaves del vehículo en el hueco de una de las ruedas, un escondite que solo conocía él y uno de los narcos ya condenados.
Además, A.L. presentó pruebas que acreditan que en la fecha de los hechos se encontraba de viaja a su país, concretamente un pasaporte con los sellos de entrada y salida de Marruecos, precisaron las fuentes consultadas.
Sin embargo, el fiscal antidroga de la Audiencia mantuvo su acusación inicial y solicitó para el procesado una pena de dos años y nueve meses de cárcel como cómplice de un delito contra la salud pública. El fiscal solicita, asimismo, que pague en caso de condena una multa de 2,8 millones de euros.
En la operación que permitió decomisar este alijo en la costa dianense participaron agentes del Grupo de Respuesta Especial contra el Crimen Organizado (Greco) de la Policía Nacional, así como otras unidades de esta institución adscritas a la comisaría de Almería y el Servicio de Vigilancia Aduanera de esa provincia.
Los ocho narcotraficantes fueron sorprendidos en las inmediaciones del camping Los Patos, cuando esperaban agazapados la llegada de una zódiac cargada con la sustancia estupefaciente. El juicio contra ellos ya se celebró hace meses en la Audiencia y se saldó con penas de prisión.
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