JUECES Y POLICIAS RECLAMAN MAS MEDIOS PARA ANALIZAR Y DESTRUIR LA DROGA INCAUTADA

El robo de droga intervenida perpetrado el pasado fin de semana ha vuelto a sacar a la luz la tardanza en su destrucción. Jueces, policías y guardias civiles han coincidido en reclamar más medios para el análisis y la incineración de las partidas decomisadas por las fuerzas de seguridad a fin de que no se repitan asaltos como el del depósito de Sanidad Exterior. "Los recursos que hay pueden ser para una provincia como Teruel, pero no como Málaga", reflexionaba un juez.

Cuando Policía Nacional, Guardia Civil o Vigilancia Aduanera aprehenden droga, hacen un primer análisis. Los estupefacientes y los detenidos son puestos a disposición judicial. Entonces se realiza un segundo análisis ya por orden judicial.

Los jueces niegan que la tardanza del proceso que concluye con la eliminación de la droga sea culpa suya. "El problema no está en los juzgados. Tratamos de ser ágiles y con frecuencia en el mismo oficio acordamos el análisis y la destrucción. La mayoría de las veces se hace en el propio juzgado de guardia. El problema es que hay poco personal para hacer los análisis", apuntaba un juez.

Pero según las fuentes judiciales es ahí donde empieza el atasco. Hay demora en la realización de los análisis que hace Sanidad Exterior. Y sin este segundo estudio, el judicial, la partida no puede ser destruida porque es una prueba para incriminar a los imputados. Una vez que se ha realizado el análisis sí se puede quemar casi toda la partida y almacenar solo muestras por si alguna de las partes solicita un contraanálisis. Fuentes policiales estimaron que entre que el juez pide el análisis y se hace, pueden pasar hasta seis meses.

También hay cuestiones legales que demoran la destrucción porque cuando el juez lo acuerda tiene que oír a la Fiscalía y a los abogados de los acusados. "No tenemos interés en acumular droga. La destrucción se hace diligentemente y cuando no es así es por condicionamientos legales", apuntaron las fuentes judiciales que matizaron que esta causa no genera muchas tardanzas.

Hecho el análisis judicial, llega finalmente la hora de la incineración de la droga. Y el atasco engorda por la falta de medios, según denuncian jueces y fuerzas de seguridad. "Entre las carencias y la mayor eficacia policial, el embudo aumenta", apuntaba la fuente judicial. El resultado es que a veces hay partidas de droga decomisada que tardan hasta dos años en ser incineradas.

El Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) ya denunciaron el problema hace más de un año. Entonces, ambas organizaciones indicaron que debido a la falta de capacidad del depósito de Sanidad Exterior para recibir la droga incautada por las fuerzas de seguridad, los cuarteles y comisarías tenían que almacenar importantes cantidades de estupefacientes en sus dependencias. Esta semana, al hilo del robo, volvieron a la carga porque afirman que la situación no ha cambiado. "Hay traficantes que ahora pueden quedar en libertad porque ha desaparecido la prueba", protestaba el secretario del SUP en Andalucía, Manuel Expósito.

Por eso, exigía el cese del titular de la Subdelegación del Gobierno, Hilario López Luna, ya que el servicio de Sanidad Exterior -que además de atascado solo tenía vigilancia presencial de 7:00 a 15:00 de lunes a viernes y solo los festivos- depende de esa Administración. Expósito insistía en que hay muchos policías y guardias civiles que se juegan la vida contra los traficantes de droga para que ocurran cosas como el robo del puerto: "El embudo hay que solucionarlo".

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